"Besándonos tú y yo se besan nuestros muertos,se besan los primeros pobladores del mundo."
Aunque solo sea por versos como los de aquí arriba, uno ya tiene que agradecer a Serrat que nos re-descubra a Miguel Hernández. Pero si además el Nano consigue hacer una melodía preciosa y cantarla como si cada palabra la hubiera escrito él, entonces el resultado es perfecto.
Me ha encantado "Hijo de la luz y de la sombra". Curiosamente los primeros acordes me han recordado al Quique González que más me gusta (el de "Aunque tú no lo sepas" o "Salitre"). La canción comienza con una guitarra que se mezcla con un piano fantástico y la voz - cada vez más madura - de Serrat.
Es muy difícil coger un poema triple - como es el de Hijo de la luz y de las sombras - y convertirlo en una canción de solo 4 minutos. Es muy difícil encontrar un estribillo cuando no existe estribillo. Y Serrat lo ha conseguido.
La canción cobra vida cuando después de las primeras estrofas, un bajo y una batería insuflan ritmo a la canción. Y aunque a muchos les chirriarán los coros, a mi me han parecido una maravilla. Serrat ha recuperado los coros al estilo Jarcha, al estilo Mocedades y ha redondeado el emocionante estribillo.
"Eres la noche, esposa. Yo soy el mediodía".
Qué ganas de escuchar el disco entero. Tendremos que esperar al 23 de Febrero.
3 Comentarios
El anterior de Henández me fascina.
El lunes estará en este mismo blog. Un abrazo